Una ley para cuidar la Madre Tierra
Por Sebastián Ochoa
Desde La Paz
La propuesta de los movimientos campesinos e indígenas incluye la prohibición de actividades económicas que afecten al medio ambiente, como las realizadas en Bolivia por decenas de empresas mineras, forestales e hidrocarburíferas.
Las organizaciones indígenas y campesinas reunidas en el Pacto de Unidad presentaron a la Asamblea Legislativa Plurinacional un proyecto de Ley de la Madre Tierra. Este documento reconoce al planeta como un ser vivo y, por lo tanto, con derechos. La propuesta incluye la prohibición de actividades económicas que afecten al medio ambiente, como las realizadas en Bolivia por decenas de empresas mineras, hidrocarburíferas, forestales y otras que deterioran las “bondades de la naturaleza”, como optan por llamar a los recursos naturales. Los asambleístas se comprometieron a debatir el texto en las próximas dos semanas. El gobierno de Evo Morales pretende presentar esta ley en la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático, que tendrá lugar en México en diciembre.
El proyecto fue elaborado por las cinco confederaciones nacionales indígenas y campesinas que apoyaron a Morales para que llegara al Palacio Quemado en 2006. Fue construido en decenas de encuentros que las organizaciones efectuaron en todos el país.
“Agradezco al Pacto de Unidad por la capacidad y la honra para trabajar propuestas de ley. Ahora nuestra obligación es aprobarla y legislarla. Quizás haya alguna coma para cambiar o algo que podamos complementar. De lo contrario, se aprobará de aquí a 15 días”, dijo el senador del MAS Isaac Avalos en la Plaza Murillo, cuando recibió el texto de manos de los dirigentes del Pacto.
Hace meses, Avalos era secretario ejecutivo de la Confederación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), a la que está afiliado el presidente aymara. Se comprometió a impulsar la aprobación de la propuesta porque “nunca nos vamos a olvidar de los movimientos sociales”, aseguró a los cientos de indígenas y campesinos en la plaza. Habían marchado desde la Ceja de El Alto, bajo una lluvia helada, para conmemorar la llegada de Cristóbal Colón y para entregar el proyecto a los legisladores.
El Pacto de Unidad había presentado en 2006 un anteproyecto de Constitución a la Asamblea Constituyente. Luego de varias modificaciones, ese documento sirvió de base a la actual Carta Magna. Aunque en apariencia tienen mucha cercanía con el gobierno de Morales, las organizaciones reclaman más participación en la gestión del Estado Plurinacional.
“Seguimos lejos del Estado. Como hace cinco años, todavía lo vemos extraño. Con este proyecto esperamos dar línea del horizonte adonde estamos yendo. No podemos ver al Estado y al gobierno lejos de las organizaciones. Tenemos que hacernos dueños de este proceso y avanzar. El proceso de cambio recién se va a instaurar cuando generemos leyes desde abajo”, dijo la secretaria ejecutiva de la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias de Bolivia “Bartolina Sisa” (Cnmciob BS), Julia Ramos, quien fuera ministra de Desarrollo Rural durante la anterior gestión de Morales.
La iniciativa recoge las conclusiones de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático y Derechos de la Madre Tierra, realizada en abril pasado en Cochabamba con la participación de 30 mil personas de todo el mundo.
Para las organizaciones, uno de los puntos más conflictivos del proyecto refiere al derecho a la consulta vinculante que tienen las comunidades indígenas y campesinas cuando el Estado quiere explotar recursos naturales de sus territorios. Así figura en la Constitución, en el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y en la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, ambos con rango de ley en Bolivia. Pero en varias normativas ya aprobadas por la Asamblea Legislativa, así como en el proyecto gubernamental de ley de la Madre Tierra, el derecho a la consulta se reconoce pero no se lo considera vinculante. Esto quiere decir que las comunidades no podrían vetar las iniciativas económicas que afecten a sus poblaciones. Según el Pacto de Unidad, el derecho a la consulta no tendría sentido si sus opiniones no fueran tomadas en cuenta por el gobierno.
Luego de que las organizaciones entregaran su propuesta, realizaron una ofrenda a la Pachamama para que fuera aprobada “sin que muevan una coma”, según el mallku de Industrias Extractivas del Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (Conamaq), Rafael Quispe. La ceremonia se complicó por la lluvia, y también por el accionar de policías que no querían permitir la realización del acto frente al edificio legislativo. Pero la presencia de medios de comunicación hizo que los uniformados dejaran de poner de manifiesto las contradicciones del Estado Plurinacional.
La ley de la Madre Tierra propone ser “paraguas” de otras leyes sobre agua, bosques, tierras, minería e hidrocarburos, entre otras. El Estado deberá contar con un Ministerio de la Madre Tierra encargado de ejecutar la normativa. El proyecto también determina obligaciones de las personas con el planeta. El Pacto exige que la población tenga mecanismos de control social para asegurar la protección de la naturaleza.
La mayoría de los ingresos en Bolivia provienen de la explotación de hidrocarburos y minerales. En este sentido, el texto establece que “la exploración, explotación, industrialización, comercialización y toda la cadena productiva debe usar tecnología adecuada que no contamine a la Madre Tierra”.
También prohíbe este tipo de actividades “dentro de áreas protegidas, lugares sagrados de los pueblos indígenas originarios campesinos, comunidades interculturales, afrobolivianos y lugares de fragilidad ecológica”. El gobierno boliviano espera que la ley de la Madre Tierra esté promulgada para la COP 16, a realizarse en diciembre en Cancún.
El Pacto de Unidad está integrado por la Cnmciob BS, la Csutcb, el Conamaq, la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (Cidob) y la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales de Bolivia (Cscib).
Conclusiones de la Conferencia Climática de Bolivia ante la ONU
www.telesurtv.net/noticias
Por Sebastián Ochoa
Desde La Paz
La propuesta de los movimientos campesinos e indígenas incluye la prohibición de actividades económicas que afecten al medio ambiente, como las realizadas en Bolivia por decenas de empresas mineras, forestales e hidrocarburíferas.
Las organizaciones indígenas y campesinas reunidas en el Pacto de Unidad presentaron a la Asamblea Legislativa Plurinacional un proyecto de Ley de la Madre Tierra. Este documento reconoce al planeta como un ser vivo y, por lo tanto, con derechos. La propuesta incluye la prohibición de actividades económicas que afecten al medio ambiente, como las realizadas en Bolivia por decenas de empresas mineras, hidrocarburíferas, forestales y otras que deterioran las “bondades de la naturaleza”, como optan por llamar a los recursos naturales. Los asambleístas se comprometieron a debatir el texto en las próximas dos semanas. El gobierno de Evo Morales pretende presentar esta ley en la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático, que tendrá lugar en México en diciembre.
El proyecto fue elaborado por las cinco confederaciones nacionales indígenas y campesinas que apoyaron a Morales para que llegara al Palacio Quemado en 2006. Fue construido en decenas de encuentros que las organizaciones efectuaron en todos el país.
“Agradezco al Pacto de Unidad por la capacidad y la honra para trabajar propuestas de ley. Ahora nuestra obligación es aprobarla y legislarla. Quizás haya alguna coma para cambiar o algo que podamos complementar. De lo contrario, se aprobará de aquí a 15 días”, dijo el senador del MAS Isaac Avalos en la Plaza Murillo, cuando recibió el texto de manos de los dirigentes del Pacto.
Hace meses, Avalos era secretario ejecutivo de la Confederación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), a la que está afiliado el presidente aymara. Se comprometió a impulsar la aprobación de la propuesta porque “nunca nos vamos a olvidar de los movimientos sociales”, aseguró a los cientos de indígenas y campesinos en la plaza. Habían marchado desde la Ceja de El Alto, bajo una lluvia helada, para conmemorar la llegada de Cristóbal Colón y para entregar el proyecto a los legisladores.
El Pacto de Unidad había presentado en 2006 un anteproyecto de Constitución a la Asamblea Constituyente. Luego de varias modificaciones, ese documento sirvió de base a la actual Carta Magna. Aunque en apariencia tienen mucha cercanía con el gobierno de Morales, las organizaciones reclaman más participación en la gestión del Estado Plurinacional.
“Seguimos lejos del Estado. Como hace cinco años, todavía lo vemos extraño. Con este proyecto esperamos dar línea del horizonte adonde estamos yendo. No podemos ver al Estado y al gobierno lejos de las organizaciones. Tenemos que hacernos dueños de este proceso y avanzar. El proceso de cambio recién se va a instaurar cuando generemos leyes desde abajo”, dijo la secretaria ejecutiva de la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias de Bolivia “Bartolina Sisa” (Cnmciob BS), Julia Ramos, quien fuera ministra de Desarrollo Rural durante la anterior gestión de Morales.
La iniciativa recoge las conclusiones de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático y Derechos de la Madre Tierra, realizada en abril pasado en Cochabamba con la participación de 30 mil personas de todo el mundo.
Para las organizaciones, uno de los puntos más conflictivos del proyecto refiere al derecho a la consulta vinculante que tienen las comunidades indígenas y campesinas cuando el Estado quiere explotar recursos naturales de sus territorios. Así figura en la Constitución, en el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y en la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, ambos con rango de ley en Bolivia. Pero en varias normativas ya aprobadas por la Asamblea Legislativa, así como en el proyecto gubernamental de ley de la Madre Tierra, el derecho a la consulta se reconoce pero no se lo considera vinculante. Esto quiere decir que las comunidades no podrían vetar las iniciativas económicas que afecten a sus poblaciones. Según el Pacto de Unidad, el derecho a la consulta no tendría sentido si sus opiniones no fueran tomadas en cuenta por el gobierno.
Luego de que las organizaciones entregaran su propuesta, realizaron una ofrenda a la Pachamama para que fuera aprobada “sin que muevan una coma”, según el mallku de Industrias Extractivas del Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (Conamaq), Rafael Quispe. La ceremonia se complicó por la lluvia, y también por el accionar de policías que no querían permitir la realización del acto frente al edificio legislativo. Pero la presencia de medios de comunicación hizo que los uniformados dejaran de poner de manifiesto las contradicciones del Estado Plurinacional.
La ley de la Madre Tierra propone ser “paraguas” de otras leyes sobre agua, bosques, tierras, minería e hidrocarburos, entre otras. El Estado deberá contar con un Ministerio de la Madre Tierra encargado de ejecutar la normativa. El proyecto también determina obligaciones de las personas con el planeta. El Pacto exige que la población tenga mecanismos de control social para asegurar la protección de la naturaleza.
La mayoría de los ingresos en Bolivia provienen de la explotación de hidrocarburos y minerales. En este sentido, el texto establece que “la exploración, explotación, industrialización, comercialización y toda la cadena productiva debe usar tecnología adecuada que no contamine a la Madre Tierra”.
También prohíbe este tipo de actividades “dentro de áreas protegidas, lugares sagrados de los pueblos indígenas originarios campesinos, comunidades interculturales, afrobolivianos y lugares de fragilidad ecológica”. El gobierno boliviano espera que la ley de la Madre Tierra esté promulgada para la COP 16, a realizarse en diciembre en Cancún.
El Pacto de Unidad está integrado por la Cnmciob BS, la Csutcb, el Conamaq, la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (Cidob) y la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales de Bolivia (Cscib).
Conclusiones de la Conferencia Climática de Bolivia ante la ONU
www.telesurtv.net/noticias
Las conclusiones de la Conferencia del Cambio Climático realizada en el departamento central de Cochabamba serán presentadas en la próxima reunión de la ONU como una muestra de la opinión de los pueblos latinoamericanos y del mundo con respecto a las medidas que se deben tomar para reducir las emisiones de gases a la atmósfera y, de alguna forma, rechazar el inconsulto acuerdo alcanzado en Copenhague.
El Gobierno de Bolivia consignó este martes las conclusiones de la Conferencia sobre Cambio Climático realizada en Cochabamba (centro) ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), para que sean incluidas en la agenda de discusión de la próxima cita del organismo mundial sobre el tema en los meses de noviembre y diciembre a realizarse en Cancún, México.
Según el coordinador de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático y Derechos de la Madre Tierra de Cochabamba, René Orellana, se cumplió con la presentación del documento,a través el embajador de esa nación ante el organismo, Pablo Salón, antes de que finalizara el tiempo establecido para el cierre de la agenda de la próxima cita climática.
Orellana añadió que en este momento están preparando el viaje de dos delegaciones, una política, encabezada por el presidente de Bolivia, Evo Morales, y la otra técnica, que trabajará en las reuniones con la ONU, las cuales precederán a la cita mexicana en el mes de diciembre.
Los eventos preparatorios se realizarán entre fines de mayo y principios de junio en Alemania, y les seguirán otros en Bangladesh y otra vez en Alemania.
"No se descartan otras reuniones porque las negociaciones están muy difíciles para que se encuentren acuerdos; en este momento está en la agenda el documento planteado por Estados Unidos en Copenhague", manifestó Orellana.
La Cumbre de Copenhague que se efectuó a finales del año 2009, contó con la presencia de 192 países, y su objetivo era llegar a acuerdo global que ayude a mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero, pero luego del intento de un grupo de países de imponer un texto inconsulto, que no implicaba ningún tipo de compromiso por parte de las naciones industrializadas, la cumbre concluyó sin ningún resultado.
Varios mandatarios entre ellos el presidente de Brasil, Bolivia y Venezuela consideraron que la cumbre fue un fracaso y responsabilizaron a los Estados Unidos de acabar con las esperanzas del mundo de conseguir un acuerdo.
Actualmente, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, impulsa la fracasada propuesta con una fuerte campaña mundial para promover su aceptación.
El Acuerdo de los Pueblos, que surgió de Cumbre de Cochabamaba donde participaron más de 35 mil representantes de movimientos sociales de todo el mundo, propone la creación de un Tribunal de Justicia Climática para enjuiciar a países contaminantes, y la celebración de un referendo sobre el tema.
En este sentido, el embajador de España en Bolivia, Ramón Santos, elogió este martes la convocatoria y las conclusiones de la Cumbre de Cochabamba pues, a su juicio, son un mensaje para la Cumbre de Cancún.
"Me parece que este es el gran aporte de la Conferencia de Tiquipaya, el manifestar la urgencia de buscar remedios al deterioro grave del medio ambiente. Fue una suerte de grito de pueblos indígenas, movimientos, académicos y muchos sectores, incluso delegados de gobiernos", consideró tras asistir a la celebración del Día de Europa, junto al Jefe de la Delegación de la Unión Europea, Kenny Bell.
A su juicio, las conclusiones de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático, "son un gran aporte y un gran mensaje para Cancún, México".
Consideró que "tenemos una segunda oportunidad en Cancún y las conclusiones de Tiquipaya, Cochabamba deben ser aprovechadas para alcanzar y conseguir acuerdos", subrayó.
El foro climático determinó, entre sus conclusiones principales la reducción de hasta un 50 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero.
EN COCHABAMBA LA CONCIENCIA DEL MUNDO
ELN de Colombia
ELN de Colombia
Convocados por el Cacique Mayor de los Pueblos Evo Morales Ayma, compañero Presidente de Bolivia, los pueblos del mundo y sus organizaciones políticas y sociales, los gobiernos y los organismos multilaterales y las personalidades más diversas, se reunirán en la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra que se realizará en Cochabamba del 19 al 22 de Abril.Es la respuesta de los pueblos al fracaso de la 15ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático realizada en Copenhague en diciembre de 2009. Es parte de la búsqueda de organizar la conciencia de cada uno de los seres humanos, en la responsabilidad sobre el aceleramiento del proceso natural del cambio climático y sus posibilidades de lucha contra los poderes mundiales y locales que ignoran deliberadamente las consecuencias presentes y a corto plazo, de negarse a ampliar los mínimos acuerdos propuestos y cambiar su modo de vida.Es un encuentro para profundizar los compromisos y lanzar un plan de acción, que presente ante la opinión pública internacional las verdaderas razones del fracaso de la Cumbre de Copenhague. Un objetivo central es construir un documento de consenso que permita de cara a la 16ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático en México, que se hará en noviembre de este año, llevar propuestas discutidas y construidas en este foro, donde se prevé la participación de miles de delegados. Así mismo revaluar los compromisos del protocolo de Kioto sobre el cambio climático, firmado en la 3ª Conferencia, en 1997.Dentro de la Batalla de Ideas global, este encuentro tiene como fin desentrañar las verdaderas causas del aceleramiento del cambio climático. El sistema de producción capitalista, ha sido denunciado por diversas organizaciones y personalidades como el principal causante de este desastre en pleno desarrollo. El compañero Presidente Evo y el comandante Hugo Chávez lo dijeron claro en Copenhague. Chávez retomó en su discurso la consigna que las multitudes que rodeaban el concilio proclamaban: NO CAMBIEMOS EL CLIMA, CAMBIEMOS EL SISTEMA.Este es el eje de la Cumbre de Cochabamba. Denunciar al capitalismo y los capitalistas. Al imperio y los imperialistas que promueven la guerra y la ganancia, el consumismo y la concentración de la riqueza, el intercambio desigual y el casino financiero internacional. Denunciar a los máximos responsables del estado ambiental del planeta.Otra propuesta que toma fuerza es la proclamación de la DECLARACION UNIVERSAL DE LOS DERECHOS DE LA MADRE TIERRA, que se uniría a la Declaración de los Derechos Humanos, como paradigmas de la humanidad y serían de obligatorio cumplimiento de las Naciones al ser promulgadas por la Asamblea General de las Naciones Unidas. Ya hay borradores en discusión. Tornar a la Tierra en sujeto de derecho internacional, conllevaría cambios serios en la forma de pensar la vida y traería diversidad de consecuencias jurídicas y sociales, en la construcción de la convivencia global entre las comunidades humanas. También se promoverán la propuestas de Evo de crear un Tribunal Climático Internacional, que tenga el poder jurisdiccional sobre países y empresas que atenten contra en forma grave contra el medio ambiente y vinculado a esto, la posibilidad de generar un Referendo mundial sobre el cambio climático, con cinco preguntas (1), que se desarrolle en diversos niveles, incluso desde los gobiernos, para legitimar las propuestas y la lucha. La naturaleza, la Pacha Mama, la Madre Tierra ya tiene su día mundial el 22 de Abril, declarado por la ONU, a propuesta del gobierno boliviano.Bolivia en palabras del compañero Evo, se está convirtiendo en un referente universal, "en el centro de defensa de la vida”. Nuestramérica desde sus raíces originarias, convoca al planeta en esta batalla descomunal por la especie humana. En Cochabamba estará este abril la conciencia del mundo.------------ -------
(1)Las cinco preguntas que están planteadas para este referéndum son:
Está usted de acuerdo:
1) con restablecer la armonía con la naturaleza reconociendo los derechos de la madre tierra? SI o NO
2) con cambiar este modelo de sobre-consumo y derroche que es el sistema capitalista? SI o NO
3) con que los países desarrollados reduzcan y reabsorban sus emisiones de gases de efecto invernadero de manera domestica para que la temperatura no suba mas de 1 grado centígrado? SI o NO
4) en transferir todo lo que se gasta en las guerras y en destinar un presupuesto superior al presupuesto de defensa para el cambio climático? SI o NO
5) con un Tribunal de Justicia Climática para juzgar a quienes destruyen la Madre Tierra? SI o NO
Apocalipsis ahora
Por Frei Betto
Por Frei Betto
El fin del mundo siempre me pareció algo muy lejano. Incluso un contrasentido. ¿Habría de destruir Dios su creación?
Hoy estoy convencido de que Dios no necesita pensar en otro diluvio. El mismo ser humano comenzó a provocarlo, a través de la degradación de la naturaleza.
Los bienes de la Tierra se han vuelto posesión privada de empresas y
oligopolios. La causa de que 4 mil millones de seres humanos vivan por debajo de la línea de la pobreza, y de que 1.2 mil millones padezcan hambre, es una sola: toda esa gente ha visto impedido su acceso a la tierra, al agua, a las semillas, a las nuevas técnicas de cultivo y a los sistemas de comercialización de los productos.
La decisión de los Estados Unidos y China de ignorar la Conferencia de Copenhague sobre Cambio Climático vuelve más agónico el grito de la Tierra. Ambos países son los principales emisores de CO2 a la atmósfera.
Son los grandes acusados del calentamiento global. Al decidir boicotear Copenhague y no firmar el compromiso de reducir sus emisiones, ellos abrevian la agonía del planeta.
Por suerte, el 25 de noviembre el presidente Obama, bajo fuerte presión, cambió de actitud y se desdijo de lo que habló en Beijing. Los EE.UU.,responsable del 23 % de las emisiones mundiales de CO2, prometerá en Copenhague reducir, hasta el año 2020, el 17 % de las emisiones de gases de efecto invernadero; el 30 % hasta el 2025; y el 42 % hasta el 2030.
¿Por qué retrocedió? Además de la presión de los ecologistas, Obama se dio cuenta de que quedaría mal en la foto si ignorase Copenhague y
apareciese en Oslo el 10 de diciembre -cuando se conmemora el 61º
aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos- para
recibir el premio Nobel de la Paz. Por lo cual estará la víspera en la capital de Dinamarca.
Es curioso: todos los premios Nobel son entregados en Estocolmo, excepto el de la Paz. Por una sencilla y cínica razón: la fortuna de la Fundación Nobel, asentada en Suecia, es el resultado de la herencia del inventor de la dinamita, Alfred Nobel (1833-1896), utilizada como explosivo en las guerras. Como no tuvo hijos, Nobel destinó los ingresos obtenidos por su patente a quien se destaque en determinadas áreas del saber.
Hay una lógica detrás de la postura ecocida de los EE.UU. y de China.
Son dos países capitalistas. El primero sigue el capitalismo de mercado; el segundo el capitalismo de Estado. Ambos coinciden en el objetivo fundamental: la lucratividad, no la sustentabilidad.
El capitalismo, en cuanto sistema, no tiene solución para la crisis
ecológica. Sabe que las medidas efectivas redundarán inevitablemente en la reducción de las ganancias, del crecimiento del PIB, de la
acumulación de riquezas.
Si viviera hoy, Marx tendría que admitir que la crisis del capitalismo ya no procede de las contradicciones de las fuerzas productivas, sino del proyecto tecnocientífico que beneficia casi exclusivamente a apenas un 20 % de la población mundial. Ese proyecto se apoya en una visión de calidad de vida que coincide con la opulencia y el lujo. Su lógica se resume en: “consumo luego existo”. Como decía Gandhi: “La Tierra satisface las necesidades de todos, menos la voracidad de los consumistas”.
Ejemplo de ello es la reciente crisis financiera. Ante la amenaza de
quiebra de los bancos, ¿cómo reaccionaron los gobiernos de las naciones ricas? ¿Les facilitaron recursos a las familias morosas, para posibilitarles mantener sus viviendas? Nada de eso. Canalizaron
verdaderas fortunas -un total de US$ 18 mil billones- hacia los bancos responsables de la crisis. Tal era la desesperación del sector, que Eduardo Galeano llegó a pensar en lanzar la campaña “Adopte un banquero”.
El planeta en que vivimos ya alcanzó sus límites físicos. Y no hay cómo buscar recursos fuera de él. El objetivo es preservar lo que todavía no ha sido totalmente destruido por el afán de ganancia humano, como las fuentes de agua potable, y tratar de recuperar lo que sea posible mediante la descontaminación de ríos y mares y la replantación de áreas deforestadas.
Ecología viene del griego ‘oikos’, que significa casa, y ‘logos’,
conocimiento. Por tanto es la ciencia que estudia las condiciones de la naturaleza y las relaciones entre todo lo que existe, pues todo lo que existe coexiste, preexiste y subsiste. La ecología trata, pues, de las conexiones entre los organismos vivos, como plantas y animales(incluyendo hombres y mujeres), y su medio ambiente.
Esa visión de interdependencia entre todos los seres de la naturaleza ha sido perdida por el capitalismo. A lo cual también ayudó una interpretación equivocada de la Biblia: la idea de que Dios creó todo y finalmente lo entregó a los seres humanos para que ‘dominasen’ la Tierra. Ese dominio quedó como sinónimo de expoliación, estupro, explotación. Los ríos fueron polucionados, los mares contaminados, el aire que respiramos envenenado.
Ahora corremos contra el reloj del tiempo. El Apocalipsis despunta en el horizonte y sólo hay una manera de evitarlo: pasar del paradigma de lucratividad al de sustentabilidad.
Agencia Latinoamericana de Informacion.
ALAI AMLATINA, 15/12/2009.